domingo, 7 de agosto de 2011

¿Qué hacer cuando mi negocio no puede seguir pagando?

Esta es una pregunta que se cuestionan muchas empresas en la época en la que vivimos, empresarios que están perdiendo la ilusión al apreciar que su negocio se va al garete, bien por un deterioro de la actividad principal o por incrementar el saldo de deudores de dudoso cobro.


Con independencia del recurso a la Ley concursal, existen caminos intermedios para tratar de buscar una solución, o al menos mitigar los perniciosos efectos del deterior de la actividad, pero ¿cómo hacerlo?


Como en la vida misma, lo primero que tenemos que hacer para solucionar un problema es reconocerlo, arrancando aquí nuestra estrategia. Cuando somos conscientes de que la situación está a punto de llegar a un punto de no retorno, hay que ponerse manos a la obra para intentar salvar nuestro negocio. Atacando los tres principales frentes, que son:
Gestión financiera: ponernos en contacto con nuestros acreedores y tratar de refinanciar nuestros compromisos financieros. Ya sea mediante una reducción de la cuota, un aumento del vencimiento, o incluso una carencia en el pago. Ante esto, es muy importante que asumamos un compromiso alcanzable teniendo presente que es lo que podemos asumir y lo que no.Gestión de personas: explicar la situación a nuestros empleados, explicarles la situación si cortapisas y las dificultades con las que nos encontramos, realizando el ejercicio de intentar ponerles en nuestro lugar. Negociando aplazamientos en el pago de nómicas o reducciones de jornada temporales.Gestión de la producción: una de las cuentas a atender más importantes es el pago a proveedores, y como tal, debemos ponernos en contacto con ellos para lograr una dilatación de los pagos, negociando pagar a 120 días en lugar de 90, o cualquier otra medida que suponga un alivio para las finanzas del negocio.

Llegar a esta determinación es una cuestión de gran complejidad y una difícil situación, puesto que lo más fácil es no hacer nada y esperar a ver como se desenvuelven los acontecimientos. Por ello, en mi opinión, la mejor estrategia es aflorar cuanto antes la situación de la empresa y tratar de solucionar los problemas antes de llegar a una situación extrema, y surjan otro tipo de colaterales. Por suerte, tanto los grandes proveedores así como las entidades financieras están tomando una mayor consciencia social, y existen múltiples herramientas para superar el bache.


 


Ver el post original

0 comentarios:

Publicar un comentario

Twitter Delicious Facebook Digg Stumbleupon Favorites More

 
Design by Free WordPress Themes | Bloggerized by Lasantha - Premium Blogger Themes | Modern Warfare 3