lunes, 22 de agosto de 2011

Aumenta salarios sin desembolsar.

Apoyar con servicios de guardería o premiar la puntualidad con una tarde libre al mes podría ser enriquecedor para tus empleados aún más que un aumento salarial.

Incrementar las percepciones es un proceso complejo, pues el margen para crecer el sueldo generalmente no se ve reflejado para el personal luego de las deducciones de impuestos.

Sin embargo, hay otras maneras de ofrecer valor al recurso humano de tu empresa, entre ellas las compensaciones en especie o los programas para premiar conductas como puntualidad y eficiencia, explica Carlos Delgado, presidente de Compensa Capital Humano, una consultoría española especializada en este tipo de políticas.

“En principio hay que entender que las compensaciones no son un gasto, son una manera de estimular las buenas prácticas; además refuerzan el liderazgo de la empresa y los empleadores, podemos decir que incluso son una inversión rentable”, señala.

Por ejemplo, si tu negocio es un taller de costura y algunas de tus empleadas son madres, puedes conseguir arreglos con alguna guardería cercana a la empresa para lograr un costo preferencial. De esta manera, podrías ofrecer el descuento o el pago del servicio como parte de los beneficios.

A comparación de un aumento, la medida resultaría menos costosa para ti como empleador y sería un apoyo importante para tu personal.

Esta estrategia se conoce como salario emocional, y el objetivo es que los empleados se sientan respaldados por parte de la empresa en sus necesidades personales, lo que mejora el desempeño y las ganancias.

Así, puedes pensar en otorgar una tarde libre al mes como premio de puntualidad o por el logro de objetivos, es una manera de generar buenos hábitos y que tu personal se sienta mejor.

Es importante contar con asesoría al crear tu modelo de compensaciones para asegurarte de que las recompensas no generen impactos desfavorables en el presupuesto de la empresa, destaca Delgado, cuya firma iniciará operaciones en México el año próximo.

De acuerdo con la empresa chilena de recursos humanos HR Consultores, la razón por la que una persona deja una organización no siempre es el dinero, por lo cual, contar con un modelo de beneficios personales resulta una herramienta para conservar los talentos.

“Muchas veces, la insatisfacción de los empleados ante las compensaciones puede afectar la productividad y el clima laboral; en un caso extremo podría redundar en la disminución del desempeño, el ausentismo y la renuncia por parte del trabajador. Esto puede ser muy costoso si se trata de un talento que aporta valor a la empresa”, señala Alejandra González Jorquera, socia gerente de HR Consultores.


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